DAVID B.

Como aquel que venció a Goliat, así eres tú, imparable
Enorme por dentro a la espera de ser descubierto
Tal día como hoy el mundo supo de ti, en aquel preciso instante
Mi memoria se detiene en aquel momento, en el que llegaste y con tu llanto al mundo callaste
Carismático ser que por ser aún te ves más grande
Ilumina con esa sonrisa tuya la mañana de los días, ese prisma de luz que estalla en nuestras pupilas
Sigue siendo el maravilloso ser que eres, sé siempre el emprendedor, el luchador que eres y que nada ni nadie se atreva a pararte.